El pasado 27 de febrero, Lili Estefan y Raúl de Molina fueron honrados con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, reconociendo sus 27 años ininterrumpidos al frente del programa «El Gordo y La Flaca».

Este logro destaca su trayectoria en el mundo del entretenimiento y su impacto en la televisión hispana.

Sin embargo, tras la ceremonia, surgieron comentarios en redes sociales que cuestionaban cómo obtuvieron esta distinción, lo que llevó a los presentadores a aclarar el proceso.

El 3 de marzo, Estefan y De Molina desmintieron los rumores de que habían comprado la estrella.

Durante la emisión de su programa, explicaron que la selección es un proceso riguroso donde los candidatos deben ser nominados y aprobados por la Cámara de Comercio de Hollywood.

Lili enfatizó que cada año hay alrededor de 300 nominaciones, de las cuales solo 24 personas son seleccionadas, destacando que no es un reconocimiento que se pueda adquirir con dinero.

Raúl de Molina detalló que, tras ser elegidos, los homenajeados requieren patrocinadores que financien los costos asociados con la develación de la estrella.

Según explicó, este proceso implica un pago de 75 mil dólares, destinado a cubrir gastos como la fabricación de la estrella, la organización del evento y la seguridad en la zona. En su caso, Univision fue uno de los patrocinadores que hizo posible la ceremonia.

El sitio oficial del Paseo de la Fama de Hollywood especifica que la nominación inicial tiene un costo de 275 dólares y que los seleccionados deben cumplir con ciertos requisitos, como trayectoria profesional de al menos cinco años, contribuciones a la comunidad y el compromiso de asistir a la ceremonia. Además, el comité de selección revisa las candidaturas y somete a votación los nombres antes de ser aprobados por la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Hollywood y las autoridades de Los Ángeles.