A los 41 años, el príncipe William ha compartido públicamente detalles sobre los desafíos personales que ha enfrentado en el último año, revelando aspectos de su vida que antes mantenía en privado. En una reciente entrevista en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, durante la ceremonia de entrega del Premio Earthshot, William describió 2024 como “el año más difícil” de su vida. Este año estuvo marcado por los diagnósticos de cáncer de su padre, el rey Carlos III, y de su esposa, Kate Middleton. El príncipe expresó: “Ha sido terrible. Probablemente ha sido el año más difícil de mi vida”.

A pesar de estos desafíos personales, William ha continuado con sus deberes reales y ha mantenido su compromiso con causas medioambientales, como el Premio Earthshot, que reconoce la contribución al ambientalismo. Durante su visita a Sudáfrica, enfatizó la importancia de un liderazgo global empático y compartió sus preocupaciones sobre el conflicto Israel-Hamas con el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa.

Además, William ha reflexionado sobre su rol como Príncipe de Gales, destacando la importancia de equilibrar sus responsabilidades reales con su vida familiar. Comentó que disfruta de su trabajo y valora la libertad de poder construir proyectos como Earthshot, pero también enfatizó la necesidad de tener tiempo para su familia en medio de los desafíos que enfrenta la familia real británica.

Estas declaraciones han ofrecido al público una visión más personal de la vida del príncipe William, mostrando su vulnerabilidad y compromiso tanto con su familia como con sus responsabilidades reales.