Pedro Armendáriz, uno de los actores más reconocidos de la Época de Oro del cine mexicano, dejó una huella imborrable en la historia del cine. Su carrera, que lo llevó a trabajar junto a grandes estrellas como Dolores del Río y María Félix, fue marcada por su gran talento y su versatilidad, pero también por una trágica y temprana muerte que conmocionó tanto a la industria como al público mexicano.
Un Ascenso Estelar
Pedro Armendáriz nació el 9 de mayo de 1912 en la Ciudad de México. Desde joven, se inclinó por el arte, primero soñando con convertirse en piloto, pero finalmente encontró su verdadera vocación en la actuación. A lo largo de su carrera, trabajó en más de 140 películas, convirtiéndose en uno de los rostros más representativos del cine nacional. Su actuación en películas como María Candelaria, La Perla, Flor Silvestre, y Enamorada lo consagró como un actor de gran presencia y talento.
Trabajó con figuras legendarias del cine mexicano, como Dolores del Río y María Félix, participando en películas que no solo fueron éxitos de taquilla, sino también esenciales para la construcción del cine mexicano clásico. Con una gran capacidad para interpretar personajes viriles, nobles y complejos, Armendáriz se convirtió en un referente de la cultura cinematográfica mexicana.
El Golpe del Cáncer y el Suicidio
La vida de Pedro Armendáriz cambió dramáticamente en 1963, cuando fue diagnosticado con cáncer linfático. El actor fue hospitalizado en Los Ángeles a principios de junio, y el pronóstico de los médicos era sombrío: le quedaba poco tiempo de vida. En el hospital, su condición de salud se agravó rápidamente.
El 18 de junio de 1963, el periódico El Universal reportó que, aunque su salud estaba en mejora, el actor seguía en estado delicado. En ese momento, se esperaba que permaneciera en el hospital durante un mes antes de poder regresar a su casa. Sin embargo, al día siguiente, la noticia de su muerte fue un golpe devastador para la industria del cine. El 19 de junio, El Universal publicó en su portada: “Pedro Armendáriz se suicida en hospital de California”.
Según los informes, Pedro Armendáriz tomó la decisión de quitarse la vida al enterarse de que el cáncer le dejaría solo un año de vida. Usó un revolver Magnum de su colección personal para dispararse, mientras su esposa Carmelita estaba fuera del hospital en ese momento. En el informe, Carmelita señaló que no parecía haber signos evidentes de depresión en su esposo ese día. A pesar del intenso dolor que sufría, no parecía haber mostrado un comportamiento especialmente negativo.
El Luto Nacional y el Legado de Pedro Armendáriz
La muerte de Pedro Armendáriz dejó una profunda tristeza en el pueblo mexicano y en la industria del cine. Su funeral fue una ceremonia emotiva, donde figuras como María Félix, quien compartió varias películas con él, lloraron la pérdida de un gran compañero. La actriz se arrodilló ante su ataúd, vistiendo luto y cubriendo su rostro con un velo mientras derramaba lágrimas.
El Sindicato de Trabajadores del Cine de México también expresó su dolor a través de un comunicado, destacando que la industria cinematográfica había perdido a uno de sus más grandes exponentes. La Asociación Nacional de Actores mencionó que Pedro Armendáriz era un hombre de carácter noble, sencillo y talentoso, cuya memoria perduraría por generaciones.
“Pedro era un hombre notable y carismático que encarnaba la esencia del espíritu mexicano. Trabajé con él en el apogeo de su carrera y todas nuestras películas fueron recibidas con gran éxito. Ahora que se ha ido, es esencial recordarlo como una piedra angular del cine nacional”, comentó Dolores del Río, quien también había trabajado junto a Armendáriz en varias películas.
La Trágica Historia de su Hijo, Pedro Armendáriz Jr.
La muerte de Pedro Armendáriz también tuvo un profundo impacto en su familia, especialmente en su hijo mayor, Pedro Armendáriz Jr., quien respetaba profundamente a su padre. La viuda de Armendáriz relató que su hijo había viajado de Los Ángeles a Ciudad de México en tren, acompañando el cuerpo de su padre en un largo trayecto que duró más de un día. A pesar del dolor de la pérdida, Pedro Armendáriz Jr. continuó con su carrera como arquitecto y, más tarde, siguió los pasos de su padre en el mundo de la actuación.
Pedro Armendáriz Jr. se convirtió en un actor destacado, participando en películas tanto en México como en Hollywood. Entre sus papeles más conocidos están sus interpretaciones en La Leyenda del Zorro (2005), Once Upon a Time in Mexico (2003) y The Mexican (2001). Aunque su carrera también estuvo marcada por éxitos, siempre recordó con admiración a su padre y su legado en el cine.
El Reconocimiento a un Hombre y un Actor Extraordinario
La figura de Pedro Armendáriz sigue siendo venerada en la cultura mexicana. Su legado como uno de los actores más importantes de la cinematografía nacional se mantiene intacto. A lo largo de su carrera, interpretó a personajes que representaban la nobleza, la valentía y la lucha del pueblo mexicano, elementos que resonaban profundamente con su audiencia.
La partida prematura de Pedro Armendáriz fue una tragedia para México, pero su legado perdura. A través de sus memorables películas y su presencia en pantalla, dejó una marca indeleble en la historia del cine mexicano. Hoy, más de seis décadas después de su muerte, su nombre sigue siendo sinónimo de excelencia actoral y de un cine que, a pesar de los años, continúa siendo un referente mundial.