De la cima del dinero al abismo de las deudas: ¿Qué convirtió a un ícono musical rico como Elvis Presley en un deudor? La respuesta te sorprenderá.
Los motivos por los que Elvis debería haber sido mucho más rico…
Elvis Presley, uno de los solistas con más éxito de todos los tiempos, acumuló más de mil millones de discos vendidos, 33 papeles en películas de Hollywood e innumerables conciertos, entre otras muchas cosas durante su brillante carrera.
Sin embargo, a pesar de estos increíbles logros, el patrimonio neto del rey del rock and roll era, sorprendentemente, demasiado bajo cuando falleció en 1977. ¿Por qué palideció su fortuna en comparación con sus logros?
Sigue leyendo para descubrir cómo se hizo rico Elvis, en qué gastaba su dinero la extravagante megaestrella y por qué debería haber sido mucho más rico de lo que en realidad fue.
Inicios muy humildes
Nacido en Tupelo, Mississippi (Estados Unidos), el 8 de enero de 1935, Elvis venía de un contexto en el que, según sus propias palabras, no tenía “nada” y creció “en la miseria”. Hay que tener en cuenta que los primeros años de su infancia tuvieron lugar en los días más oscuros de la Gran Depresión de Estados Unidos.
La Gran Depresión es como se conoce a la crisis económica que tuvo lugar cuando la bolsa de Nueva York se desplomó en 1929. Un hecho que afectó a millones de personas durante la época.
Tiempos difíciles
La vida no fue nada fácil para la familia de Elvis. Cuando Vernon salió de la cárcel solo pudo encontrar un trabajo mal pagado como jornalero. La familia tuvo que vivir de alquiler en alquiler. A los cuatro años, Elvis oyó a sus padres quejarse sobre el pago de las facturas y lo tuvo claro: prometió que algún día les compraría un Cadillac.
Fue una promesa que acabaría cumpliendo. De hecho, se cree que el magnánimo icono de la música regaló unos 200 Cadillacs durante su vida, una vez alcanzó la fama.
Espíritu generoso
Algo está claro: Elvis fue una persona exageradamente generosa desde temprana edad.
A la temprana edad de nueve años, la futura estrella tuvo una especie de “despertar religioso” mientras presenciaba uno de los servicios religiosos a los que solía asistir. En ese momento, tuvo la necesidad de hacer algo bueno por los demás, así que regaló su preciada colección de tebeos, lo único de valor que poseía, distribuyéndolos entre los niños de su barrio.
Su primera guitarra
Esta generosidad desenfrenada era una de las virtudes más admiradas de Elvis. Sin embargo, no contribuyó en nada a su saldo bancario y más tarde le pondría a merced de personas sin escrúpulos que se aprovecharon descaradamente de su buen carácter.
Con tan poco a su nombre, no cabe duda de que el joven de gran corazón se emocionó al recibir una guitarra por su undécimo cumpleaños, aunque inicialmente había pedido una bicicleta.
Mudanza a Memphis
En 1948, los Presley se trasladaron a un proyecto de viviendas sociales en Memphis, Tennessee. Fue allí donde el joven Elvis, que a esas alturas era prácticamente inseparable de su guitarra, perfeccionó su talento musical y desarrolló el estilo inimitable que le hizo tan famoso.
Tras graduarse en el instituto, donde asombró a sus compañeros en el espectáculo de fin de curso con su voz única, el prometedor adolescente puso en marcha su carrera musical.
Primera grabación
Elvis grabó su primer disco en agosto de 1953, pagando a Sun Records unos 4 dólares (o 47 dólares en dinero actual, unos 44 euros) por el privilegio. En el enero siguiente volvió al estudio y grabó otros dos temas.
Para llegar a fin de mes, el músico consiguió un trabajo como camionero, ganando poco más de un dólar a la hora.
Apoyos tempranos
Marion Keisker, que era ayudante del jefe de Sun Records, Sam Phillips, no paraba de hablar maravillas de Elvis al mandamás de la discográfica.
Según Keisker, Phillips buscaba un artista blanco que pudiera llevar la música blues y R&B afroamericana a la corriente dominante y estaba convencido de que una estrella como Elvis le haría ganar “mil millones de dólares” (unos 930 millones de euros).
Paquete perfecto
Por desgracia, el racismo estaba muy extendido en aquella época, por ello, Sun Records intentaba comercializar a los artistas negros de su lista entre el público blanco. La embriagadora combinación de blues y R&B con un toque country de Elvis cumplía todos los requisitos para llegar hasta ese público blanco que tanto ansiaba la discográfica.
La prometedora estrella, que presumía de un carisma magnético y unos provocativos movimientos de baile, no tardó en grabar música para la discográfica.
Elvis Presley, conocido como el “Rey del Rock and Roll”, acumuló una fortuna considerable durante su carrera, pero al momento de su fallecimiento en 1977, su situación financiera era precaria. A pesar de haber generado ingresos millonarios, su patrimonio neto se había reducido significativamente debido a una combinación de gastos extravagantes, mala gestión financiera y decisiones contractuales desfavorables.
Fin
Uno de los factores más influyentes en la disminución de su fortuna fue la relación con su mánager, el coronel Tom Parker. Parker, quien manejó la carrera de Elvis durante más de dos décadas, tenía un control casi absoluto sobre las decisiones profesionales y financieras del artista. Se ha documentado que Parker negociaba contratos que le otorgaban hasta el 50% de las ganancias de Presley, una cifra exorbitante en comparación con los estándares de la industria. Además, su adicción al juego lo llevó a tomar decisiones que beneficiaban sus propios intereses financieros, a menudo en detrimento de los de Elvis.
La falta de asesoramiento financiero adecuado también jugó un papel crucial. Elvis era conocido por su generosidad y estilo de vida lujoso, realizando gastos significativos en propiedades, automóviles y regalos costosos para su círculo cercano. Sin una planificación financiera sólida, estos desembolsos contribuyeron al deterioro de su situación económica.
Tras su muerte, el patrimonio de Elvis fue heredado por su única hija, Lisa Marie Presley. A pesar del valor histórico y cultural de los activos, incluyendo la famosa mansión Graceland, la falta de liquidez y las deudas acumuladas representaron desafíos significativos para la preservación y administración de su legado.
La historia financiera de Elvis Presley sirve como una lección sobre la importancia de la gestión adecuada de las finanzas personales y la necesidad de contar con asesores confiables, especialmente para individuos que manejan grandes sumas de dinero en industrias tan volátiles como la del entretenimiento.