Ross Gerber, uno de los primeros inversores de Tesla, exige que Elon Musk deje el cargo de CEO, argumentando que su falta de enfoque y sus polémicas políticas están llevando a la empresa a una crisis.
Elon Musk, una de las figuras más polarizantes en los ámbitos empresarial y político, enfrenta una nueva controversia. Ross Gerber, uno de los primeros inversores de Tesla, ha pedido públicamente que Musk renuncie como CEO de la compañía, argumentando que su liderazgo—o la falta del mismo—está llevando a Tesla a una crisis sin precedentes.
Gerber, un destacado inversor, ha instado a Musk a que se reenfoque en Tesla o ceda el control a alguien que pueda hacerlo. Esta demanda surge después de que el valor de mercado de Tesla se desplomara en más de 800 mil millones de dólares desde diciembre, una caída que Gerber atribuye a la atención dividida de Musk y sus crecientes compromisos políticos.
Uno de los mayores motivos de preocupación para Gerber es el enfoque de Musk en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) dentro de la administración de Donald Trump, lo que, según él, ha distraído al multimillonario de sus responsabilidades principales en Tesla.
«La reputación de la empresa ha sido destruida»
En una entrevista con Sky News, Gerber no se mordió la lengua:
“Tesla está en una crisis”, declaró. “Las ventas se están desplomando. La reputación de la empresa ha sido destruida por Elon Musk. Literalmente no puedes vender el mejor producto del mercado porque el CEO es tan divisivo”.
Gerber argumentó que Tesla, una vez pionera en la industria de los vehículos eléctricos, ahora sufre un vacío de liderazgo mientras Musk divide su atención entre sus diversos proyectos, incluyendo Twitter (X) y sus actividades políticas.
“O Elon debería volver a Tesla y ser el CEO de Tesla, renunciando a sus otros trabajos, o debería enfocarse en el gobierno y seguir haciendo lo que está haciendo, pero encontrar un CEO adecuado para Tesla”.
Musk permanece en silencio—por ahora
Musk, conocido por responder rápida (y a menudo controvertidamente) a las críticas en Twitter, no ha comentado públicamente sobre las declaraciones de Gerber. Sin embargo, la creciente frustración entre los inversores sugiere que la presión está aumentando para que Musk tome una decisión: o se recompromete con Tesla o deja el cargo.
Con Tesla enfrentando caídas en las ventas, boicots crecientes y una feroz competencia en el mercado de vehículos eléctricos, la gran pregunta sigue siendo: ¿Renunciará Musk, o luchará por recuperar el impulso perdido de Tesla?