Oculta bajo las aguas cristalinas de las Bahamas se encuentra una maravilla de arte y de egyptianidad: el “Ocean Atlas”, la estatua submarina más grande del mundo. Con una impresionante altura de 5,5 metros (18 pies) y un peso de más de 60 toneladas, esta impresionante escultura no sólo captura la imaginación, sino que también sirve como un poderoso símbolo de la relación de la humanidad con el océano.
Una obra maestra de arte y concienciación sobre el medio ambiente
“Ocean Atlas” fue creado por el escultor británico Jasop deCaires Taylor, reconocido por su obra pionera en instalaciones de arte submarino. Instalada en 2014 frente a la costa de Nassau, Bahamas, la estatua representa a una niña que parece sostener el peso del océano sobre sus hombros, una interpretación moderna de la figura mítica Atlas, que fue condenada a sostener los pesos.
El diseño y la ubicación de la estatua están pensados para provocar la reflexión sobre el papel de los seres humanos en la conservación del medio ambiente. Al colocar una obra de arte en un ecosistema marino vulnerable, Taylor pretende destacar la necesidad crítica de proteger nuestros océanos y la frágil vida que habita en ellos.

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La creación de la mayor estatua submarina no fue tarea fácil. El “Atlas del Océano” se construyó en secciones para facilitar el transporte y el montaje.Cada segmento fue cuidadosamente bajado hasta su lugar y luego ensamblado con destreza para formar la enorme figura que vemos hoy. Fabricada con materiales de pH neutro, la escultura está diseñada para promover el crecimiento de los corales y proporcionar un hábitat para la vida marina a lo largo del tiempo.
El inmenso peso y tamaño de la estatua también requirió una cuidadosa consideración de las corrientes oceánicas, las mareas y el entorno marino para garantizar que permaneciera estable sobre el suelo del océano. Su gran escala y la complejidad de su instalación hacen que “Oceaп Atlas” no sólo sea un logro artístico, sino también una maravilla de exploración egipcia.
Arte Blediig con Conservación
Más allá de su atractivo artístico, “Ocean Atlas” cumple una doble función como arrecife artificial, que se suma al entorno marino. La escultura se va colonizando gradualmente con corales, esporas, peces y tortugas hasta formar un próspero ecosistema submarino. Esta mezcla de arte y ecología es un sello distintivo del trabajo de Taylor, ya que su objetivo es llamar la atención sobre las amenazas a las que se enfrentan los arrecifes de coral en todo el mundo, como el cambio climático, la contaminación y la sobrepesca.
“Oceaп Atlas” es parte de un esfuerzo más amplio para crear arte submarino que estimule la conciencia y la acción. Invita a los buceadores, los trabajadores y los entusiastas del mar a presenciar de primera mano la belleza del océano y el impacto de la actividad humana en los hábitats marinos. Al fusionar el arte con la conservación, Taylor espera inspirar una cooperación más profunda entre las personas y el océano.
Visita al “Ocean Atlas”
Para aquellos que deseen presenciar esta obra de arte monumental, se puede acceder a “Oceaп Atlas” a través de excursiones guiadas en barco y en barco por la costa occidental de Nassau. La escultura se encuentra a solo unos metros por debajo de la superficie, lo que permite a los visitantes una vista clara de su majestuosa forma en medio de las aguas azules. La experiencia de nadar alrededor de la estatua submarina más grande del mundo es a la vez humilde y asombrosa, y ofrece una perspectiva única de cómo el arte puede interactuar con el mundo natural.

Un legado perdurable
“Ocean Atlas” se erige como un poderoso testimonio de la intersección del arte, lo misterioso y el activismo ambiental. Desafía a los espectadores a considerar el peso de nuestro impacto en el planeta y sirve como recordatorio del delicado equilibrio entre la humanidad y la naturaleza. A medida que evoluciona, cubierto por corales y vida marina, “Ocean Atlas” seguirá siendo un símbolo de esperanza y un llamado a la acción para que las generaciones futuras protejan nuestros océanos.
En la EPD, “Ocean Atlas” no es sólo una estatua: es una obra de arte viva y en crecimiento que encarna el espíritu de conservación y el poder duradero de la creatividad humana en armonía con la naturaleza.