El Impactante Derribo del Helicóptero del CJNG: Un GOLPE DIRECTO A LA SEGURIDAD DE MÉXICO
Un día de mayo de 2015 marcó un antes y un después en la historia de la lucha contra los cárteles en México. En lo que parecía un guion sacado de una película de acción, el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) derribó un helicóptero militar con un lanzacohetes ruso, un ataque que dejó a nueve militares muertos y a todo un país en shock. Este incidente ocurrió en la región montañosa de Villa Purificación, Jalisco, y desató una ola de violencia sin precedentes.
El ataque fue cuidadosamente planeado y ejecutado por el CJNG, cuyo poderío militar sorprendió a las autoridades mexicanas. La aeronave, un helicóptero Kugar de la Fuerza Aérea, fue alcanzada por un proyectil disparado desde un RPG (lanzacohetes propulsado por cohete), una arma rara en México. Este ataque no solo demostró la capacidad de los narcotraficantes para operar con armamento militar de alta gama, sino también su habilidad para coordinar operaciones complejas.
El hecho dejó claro que el CJNG no es solo un grupo de delincuentes comunes, sino una organización criminal con recursos y tácticas de guerra que superan las estrategias convencionales del gobierno. Tras el derribo, el cártel desató una serie de ataques coordinados en Jalisco y otros estados cercanos, dejando 39 bloqueos, vehículos incendiados y enfrentamientos con las fuerzas del orden.
Este evento obligó a las autoridades a replantear sus tácticas de seguridad y a reconocer que la lucha contra el narcotráfico en México había cambiado para siempre. La violencia no solo fue un golpe militar, sino también un golpe simbólico al Estado mexicano, mostrando que el CJNG estaba dispuesto a enfrentar directamente a las fuerzas federales para mantener su control territorial.