En un giro inesperado y polémico, Anne, la Princesa Real, ha decidido actuar contra lo que considera una hipocresía en el proceso conocido como “Megxit”. Esta medida incluye la congelación de toda la herencia del Príncipe Harry, lo que podría tener consecuencias significativas para él y su familia.

Anne, conocida por su franqueza y compromiso con la monarquía, ha tomado una postura firme contra el llamado “Megxit”, el término que describe la decisión del Príncipe Harry y Meghan Markle de distanciarse de sus responsabilidades reales y mudarse a América del Norte. La Princesa Real ha manifestado que este movimiento representa una contradicción grave, especialmente dado el estilo de vida de lujo y el acceso a beneficios que los Sussex han mantenido a pesar de su retirada de los deberes oficiales.

La reciente decisión de Anne de congelar la herencia del Príncipe Harry ha provocado un gran revuelo. Según informes, esta medida tiene como objetivo presionar a Harry para que se adhiera a los términos de su salida de la familia real y deje de disfrutar de los beneficios financieros asociados con su estatus real. La herencia, que incluye propiedades y activos que Harry habría recibido en calidad de príncipe, ahora está en espera mientras se revisa su situación.

Esta acción ha sido vista por algunos como una medida drástica para hacer cumplir las condiciones del “Megxit”, pero también ha generado debates sobre su equidad y las implicaciones para la relación entre Harry y el resto de la familia real. Anne ha defendido su decisión al argumentar que es necesario mantener la integridad y la cohesión dentro de la familia real, especialmente cuando se trata de figuras públicas que eligen distanciarse de sus responsabilidades oficiales.

La congelación de la herencia no solo afecta a Harry, sino que también tiene un impacto en Meghan Markle y sus hijos. La medida ha intensificado la controversia en torno al “Megxit” y ha atraído la atención de los medios y del público. Mientras tanto, Harry y Meghan se han enfrentado a un nuevo desafío mientras tratan de navegar en esta complicada situación y defender sus decisiones.

Este desarrollo pone de manifiesto las tensiones continuas entre los Sussex y el resto de la familia real. Con la herencia de Harry congelada y el “Megxit” en el centro de la controversia, el futuro de la relación entre Harry, Meghan y la familia real sigue siendo incierto y objeto de gran interés y especulación.