Irasema Dilián fue una actriz de origen brasileño que brilló en la Época de Oro del cine mexicano.
Su participación en películas al lado de grandes luminarias y su impresionante belleza le valieron el reconocimiento del público y la crítica. Sin embargo, su prometedora carrera en México terminó abruptamente, rodeada de polémicas que la llevaron a desaparecer del cine mexicano.
Nacida en Río de Janeiro, Brasil, el 27 de mayo de 1924, Dilián fue hija de padres polacos, siendo su padre parte del servicio diplomático de Polonia. Su infancia la pasó viajando por diferentes países, lo que contribuyó a su vasta cultura. Su primer contacto con el cine ocurrió en Italia, donde debutó en 1940 bajo la dirección de Vittorio De Sica, lo que la convirtió en una estrella en ese país.
A comienzos de los años 50, el cine mexicano se había consolidado como uno de los principales destinos para actores internacionales que buscaban el éxito. En 1951, Irasema llegó a México gracias a una excelente negociación del productor Auduino Dino, debutando en la película *Muchachitas sin uniforme*. Esta producción le abrió las puertas a la fama y le permitió participar en proyectos más complejos, como *Paraíso robado*, donde su actuación fue tan destacada que recibió una nominación a los premios Ariel como Mejor Actriz.
Además de su éxito en México, Irasema trabajó en el cine español y cubano, donde también se consolidó como una actriz reconocida. Su fortuna creció considerablemente, ya que negociaba contratos muy lucrativos. En el ámbito personal, se casó con Auduino Dino, el productor que la había llevado al cine mexicano. Sin embargo, el éxito de Irasema generó tensiones en su matrimonio, y Dino decidió distanciarse de ella temporalmente.
El escándalo que marcó su caída vino tras una desafortunada declaración a la prensa. Irasema criticó abiertamente la devoción de los mexicanos a la Virgen de Guadalupe, afirmando que solo reconocía a la Virgen María. Esta declaración surgió después de haber sido rechazada para interpretar el papel de la Virgen de Guadalupe en una película sobre la vida de Juan Diego. La industria cinematográfica mexicana le exigió una disculpa pública, pero Irasema, furiosa, se negó rotundamente. Como resultado, fue excluida de todos los proyectos en México y su carrera en el país llegó a un abrupto final.
Irasema Dilián murió el 16 de abril de 1996 en Italia, dejando un legado artístico manchado por la controversia, pero que sigue siendo recordado por su inmenso talento y su impacto en el cine mexicano.