En su reciente aparición en The Graham Norton Show, Salma Hayek compartió una anécdota divertida y conmovedora sobre su cumpleaños número 50. La actriz, quien celebró este hito mientras estaba en el set, reveló cómo una sorpresa inesperada la conmovió profundamente.

Hayek explicó que, aunque no se sometió a tratamientos de Botox para marcar la ocasión, sí admitió que había pasado por algunos procedimientos estéticos menores. “No tengo Botox, pero confieso que me hago algunos pequeños retoques. Solo para que no se vea tan mal de cerca,” dijo entre risas.

La verdadera sorpresa llegó cuando, tras un largo día de trabajo en su cumpleaños, abrió la puerta del coche y se encontró con una serenata de mariachis. “Estaba realmente emocionada. Lloré cuando los vi. Fue increíble,” compartió Hayek.

Sin embargo, la sorpresa vino acompañada de una dosis de humor. Hayek reveló que el productor del evento estaba preocupado por la elección del mariachi. “Me dijeron que el productor se preocupaba si era políticamente correcto traer mariachis porque yo soy mexicana. Pensaba que podría parecer racista,” contó Hayek. “Así que hice una broma y le dije, ‘Estoy muy agradecida por la sorpresa, pero ¿vamos a tener tacos también? Porque eso sí sería un poco racista, ¿no?’”

La conversación mostró el lado juguetón de Hayek y su habilidad para manejar la celebración de manera ligera y auténtica, reflejando su carácter cálido y su sentido del humor.