Recientemente, Ana Bárbara reveló detalles sorprendentes sobre la canción que convirtió a Ángela Aguilar en una estrella y las tensiones con Belinda que salieron a la luz. La verdad es que el éxito de Ángela con esta canción no se debió solo a su talento, sino también a un inesperado giro del destino.

Ana Bárbara, quien originalmente escribió la canción, la ofreció primero a Belinda durante la entrega de premios de la radio en 2019. Aunque Belinda quedó encantada con el tema, su apretada agenda y compromisos con su disco impidieron que pudiera grabarla a tiempo. Ana Bárbara, viendo la oportunidad de no perder el impacto del tema, decidió ofrecerlo a Ángela Aguilar, quien estaba ansiosa por recibirlo.

Ana Bárbara explicó que Belinda estaba demasiado ocupada para comprometerse con la canción en ese momento, por lo que se la pasó a Ángela Aguilar. La joven cantante, apenas iniciando su carrera, se convirtió en la artista ideal para dar vida a la canción, y el resultado fue un rotundo éxito. La canción no solo se convirtió en un éxito comercial, sino que también consolidó a Ángela Aguilar como una de las artistas más prometedoras del momento.

Sin embargo, este giro en la historia no pasó desapercibido para Belinda, quien sintió que el éxito de la canción debería haber sido suyo. Aunque Belinda nunca se pronunció abiertamente sobre su decepción, los seguidores comenzaron a especular que esta situación contribuyó a las tensiones entre ella y Ángela Aguilar. Años después, cuando Belinda estaba en una relación con Cristian Nodal, surgieron rumores de que Ángela intentaba “quitarle” a su pareja, una situación que finalmente se materializó en una sorprendente relación entre Ángela y Cristian.

Ana Bárbara, por su parte, afirmó que no hay resentimientos y que la canción simplemente encontró su lugar con quien más la necesitaba en ese momento. Ella expresó que el éxito de la canción con Ángela fue algo natural, como un “matrimonio” perfecto entre la música y la intérprete adecuada.

En resumen, la historia detrás de esta canción es un recordatorio de cómo la vida y la música pueden llevar a giros inesperados. Mientras que Belinda puede haber sentido que la canción le pertenecía, el éxito de Ángela Aguilar con el tema demuestra que a veces las cosas simplemente suceden por una razón.