Recientemente, se ha desatado una gran polémica dentro de la familia Aguilar a raíz de la boda secreta entre Ángela Aguilar y Christian Nodal, que tuvo lugar el 24 de julio. Este evento, al cual solo asistieron familiares y amigos cercanos, ha generado controversia, especialmente debido a la ausencia notable de Emiliano Aguilar, el hijo mayor de Pepe Aguilar, quien no fue invitado a la ceremonia.

La controversia estalló cuando Emiliano publicó un comentario en el perfil de Instagram de su padre, Pepe Aguilar, en el que sarcásticamente agradecía por no haber sido invitado a la boda. Su comentario, “GPI” (Gracias por Invitar), rápidamente se hizo viral, obteniendo más de 22,000 “me gusta” y generando una ola de reacciones en las redes sociales. Muchos usuarios comenzaron a especular sobre la relación entre Emiliano y su familia paterna, sugiriendo que la falta de cercanía podría haber sido la razón de su exclusión del evento.

El comentario de Emiliano no solo provocó reacciones en el perfil de su padre, sino que también causó revuelo cuando el joven dejó un mensaje en la cuenta de Instagram de Cazzu, la exnovia de Christian Nodal. Este acto añadió un nuevo nivel de intriga a la situación, especialmente porque Cazzu y Nodal terminaron su relación poco antes de la boda. Aunque Emiliano eliminó su comentario poco después de publicarlo, el daño ya estaba hecho, y la especulación continuó en torno a sus intenciones y el estado de su relación con su familia.

A pesar de la polémica generada, ni Pepe Aguilar ni Ángela Aguilar han hecho declaraciones públicas sobre la ausencia de Emiliano en la boda. Esta falta de respuesta ha dejado a muchos seguidores preguntándose si la familia Aguilar enfrentará públicamente las tensiones internas que han salido a la luz a raíz de este evento.

Además, se ha informado que la boda de Ángela y Nodal fue un evento íntimo, con una lista de invitados que no superó las 45 personas. Entre los presentes se encontraban celebridades como Marc Anthony y Rommel Pacheco, lo que hace que la ausencia de Emiliano sea aún más destacable. A pesar de todo, se especula que la pareja podría realizar una segunda ceremonia por la iglesia en un futuro cercano, en la que se espera que Emiliano finalmente esté invitado, lo que podría ofrecer una oportunidad para sanar las tensiones familiares.

En conclusión, la boda de Ángela Aguilar y Christian Nodal, que debía ser un momento de celebración, ha destapado problemas familiares que han capturado la atención del público. La falta de invitación a Emiliano Aguilar ha creado una brecha pública que, a medida que pasan los días, solo aumenta la curiosidad y la preocupación sobre la dinámica interna de una de las familias más famosas de la música mexicana.