El reconocido conductor de televisión Daniel Bisoño, quien forma parte del elenco del popular programa “Ventaneando,” ha atravesado uno de los momentos más complicados de su vida debido a graves problemas de salud que lo llevaron a someterse a un trasplante de hígado. A sus 51 años, Bisoño había sido diagnosticado con hígado graso, una condición que empeoró con el tiempo y que finalmente lo puso en la necesidad urgente de un trasplante para salvar su vida.

Desde el año pasado, su estado de salud se había deteriorado considerablemente, lo que preocupó enormemente a su familia y amigos. Durante una reciente entrevista, Alex Bisoño, hermano del conductor, reveló que la familia estaba en una constante angustia mientras esperaban que apareciera un donador compatible. Finalmente, el tan esperado momento llegó cuando recibieron la llamada que anunciaba la disponibilidad de un hígado compatible. Sin perder tiempo, la familia corrió al hospital para proceder con los trámites necesarios y realizar los estudios pertinentes al órgano donado.

Daniel Bisogno recibió la visita de su hija Michaela en terapia intensiva

El traslado al hospital estuvo lleno de emociones, y según contó Alex, Daniel le hizo una petición conmovedora en caso de que algo le ocurriera durante la operación: que se encargara de cuidar a su hija Micaela. Este momento fue especialmente difícil para Alex, quien confesó que le costaba contener las lágrimas al recordar la conversación con su hermano.

Entre lágrimas, Daniel Bisogno le pide a su hermano cuidar a su hija como  última voluntad | Gluc.mx

La operación se llevó a cabo la noche del miércoles pasado y tuvo una duración de seis horas. Afortunadamente, los médicos confirmaron que la intervención fue un éxito, y aunque Bisoño aún se encuentra bajo observación, se espera que pronto sea dado de alta. Su recuperación, sin embargo, será un proceso largo y delicado, pues deberá seguir estrictas medidas de reposo durante un mes en casa y tomará aproximadamente tres meses antes de que pueda retomar su vida normal.

Este trasplante representa el cierre de un ciclo sumamente difícil para Daniel Bisoño y su familia, quienes han pasado por momentos muy duros en los últimos meses. A principios de año, el conductor había sido hospitalizado por una grave afección pulmonar que lo mantuvo intubado durante varias semanas. Tristemente, durante su estancia en el hospital, su madre María Araceli Bisoño falleció debido a complicaciones de salud relacionadas con la pandemia, lo que sumó más dolor a la ya difícil situación.

Ahora, la familia espera con ansias la recuperación total de Daniel, agradecidos de haber superado este difícil obstáculo.