Elizabeth Gutiérrez y William Levy, una pareja que por más de 20 años fue considerada una de las más sólidas en el mundo del espectáculo, ahora enfrenta una separación definitiva y dolorosa. Después de varias rupturas y reconciliaciones, la actriz ha confirmado que ya no viven juntos y que ha decidido mudarse con su hija Kailey a un apartamento en Brickell, dejando la residencia familiar que compartían con Levy.

La separación, que ha sido objeto de rumores y especulaciones, fue recientemente confirmada por una fuente cercana a la familia, quien reveló a la revista People en Español que Levy decidió poner fin a la relación. Según este confidente, Elizabeth y Kailey dejaron el hogar familiar hace un tiempo, lo que ha dejado a William Levy a cargo de su primogénito, Christopher.

A pesar de los intentos por salvar su relación, Elizabeth ha declarado que el vínculo entre ellos ya no existe y que ambos han decidido tomar caminos separados. Aunque algunos rumores apuntan a que Levy expulsó a Gutiérrez de la casa debido a un posible romance con la actriz Samadhi Zendejas, otros aseguran que fue la propia Elizabeth quien decidió dejar la residencia por su propia cuenta.

La situación se tornó aún más tensa cuando Zendejas compartió un video en Instagram donde aparece Levy conduciendo y cantando “Gozar la Vida” de Julio Iglesias, lo que muchos interpretaron como una señal de que la relación con Elizabeth estaba oficialmente terminada.

Horas después de la publicación de Zendejas, Elizabeth respondió con una serie de mensajes en sus redes sociales, que algunos consideraron como una indirecta hacia Levy y su nueva relación. En sus publicaciones, Elizabeth expresó su gratitud por haber aprendido lo que no había visto antes y sugirió que, si alguien más podía tenerlo, ella ya no lo quería.

Aunque durante su relación Levy y Gutiérrez no llegaron a casarse, Elizabeth siempre consideró su compromiso con la familia como más importante que un matrimonio. Sin embargo, después de dos décadas juntos, parece que el amor entre ellos ha llegado a su fin.

Este cierre marca el final de una era en sus vidas, y aunque la separación ha sido dolorosa, ambos parecen estar enfocados en seguir adelante, cada uno por su propio camino, mientras enfrentan los retos de la vida por separado.