En una reciente entrevista con Lili Estefan para el programa *El Gordo y la Flaca*, Ángela Aguilar, una de las artistas más destacadas de la música mexicana, vivió un momento bastante incómodo cuando la conductora le hizo una serie de preguntas sobre su físico. La situación dejó sorprendida y algo molesta a la joven cantante, que, con solo 21 años, se encontró ante un cuestionamiento que muchos consideran inapropiado y fuera de lugar.
Lili Estefan, famosa por su estilo directo y a menudo irreverente, comenzó la entrevista con un comentario sobre la figura de Ángela. “Ángela, todos queremos saber, ¿cómo tienes esas n***s tan paradas? ¿Cómo tienes esa cinturita? Mira, le da pena”, dijo Estefan mientras miraba a Ángela de arriba a abajo, quien visiblemente sorprendida y algo incómoda, intentaba mantener la compostura. Sin embargo, las preguntas no se detuvieron ahí. La conductora, sin cambiar su tono y sin mucha empatía, continuó con un comentario sobre el vestido de la cantante, destacando las plumas naranjas y su figura, pero rápidamente pasó a preguntar si estaba haciendo dieta o ejercicio, insinuando que quizás el montar a caballo era la causa de su figura.
Ante este bombardeo de preguntas sobre su físico, Ángela Aguilar, que usualmente se muestra madura y serena en entrevistas, no pudo evitar mostrar signos de incomodidad. Con una risa nerviosa y sin saber muy bien cómo reaccionar, la cantante intentó zafarse de la situación diciendo: “Yo creo que es por montar a caballo, yo la verdad no hago ni dieta, ni ejercicio, ni nada”. Aunque trató de restarle importancia, la situación fue clara: Lili Estefan había cruzado una línea en cuanto a lo que es apropiado preguntar en una entrevista, especialmente cuando se trata de una joven tan exitosa como Ángela.
Las reacciones en redes sociales no tardaron en llegar, y muchos seguidores de Ángela y fanáticos de la cultura pop en general expresaron su descontento con las preguntas de Lili Estefan. Mientras algunos defendieron la honestidad y espontaneidad de la conductora, la mayoría coincidió en que se había excedido al centrar la conversación en el cuerpo de la cantante, en lugar de enfocarse en su carrera, su música o sus logros personales. Además, se destacó que, como figuras públicas, las artistas jóvenes como Ángela ya enfrentan una presión constante en cuanto a su imagen, por lo que comentarios como los de Lili Estefan solo perpetúan estereotipos dañinos.
Este incidente pone de manifiesto la importancia de tratar a las figuras públicas con respeto y empatía, evitando comentarios que puedan resultar humillantes o incómodos. Es esencial que los medios de comunicación y los periodistas reconozcan que la imagen de una persona no debe ser el centro de todas las conversaciones, especialmente cuando se trata de temas tan personales como el cuerpo o las decisiones de salud y estética. Las entrevistas deberían centrarse en el talento y la personalidad de los artistas, dejando de lado los juicios sobre su apariencia física.
Ángela Aguilar, quien ha sabido manejar la presión mediática con gracia y profesionalismo, seguramente tomará este incidente como una lección más en su carrera. Sin embargo, es una oportunidad para que el público reflexione sobre cómo tratamos a los artistas, especialmente a las mujeres jóvenes, en la industria del entretenimiento.