En el último episodio de “La Casa de los Famosos,” Agustín se enfrentó a un desafío monumental que lo llevó al límite. En un reto de comer, los participantes debían devorar un plato de palomitas bañadas en un explosivo caldo de salsa Yaya, lo que convirtió la prueba en una batalla épica. La tensión se palpaba en el ambiente mientras Agustín, Mayito y Karime se preparaban para enfrentar la prueba.

La estrategia del reto fue clara: consumir la mayor cantidad de palomitas empapadas en salsa sin hacer gestos de incomodidad. Desde el inicio, Agustín demostró su determinación, comiendo sin parar mientras sus compañeros luchaban por mantenerse en pie. A medida que el caldo se vertía sobre las palomitas, la situación se tornaba cada vez más caótica; Mayito y Karime estaban cubiertos de salsa, lo que solo aumentaba la diversión del espectáculo.

Agustín, a pesar de ser argentino, sorprendió a todos con su capacidad para manejar la salsa, superando incluso a los mexicanos presentes. Después de un intenso duelo, logró terminar su porción y se lavó las manos, visiblemente exhausto pero triunfante. Como recompensa por su valentía, recibió un codiciado premio: un día de spa. Sin embargo, en un tono humorístico, Agustín bromeó con la jefa diciendo que preferiría un “lavado de estómago” debido a la cantidad de salsa que había consumido.

Los efectos de la competencia no tardaron en aparecer, ya que Agustín reconoció que le ardía la cara después de la ingesta excesiva de salsa. El desafío fue sin duda complicado, pero también fortaleció la camaradería entre los participantes, quienes se dieron cuenta de que a veces, los retos más difíciles pueden convertirse en recuerdos inolvidables. Sin embargo, todos se preguntaban qué tan bien se sentiría Agustín después de su merecido día de spa, considerando los posibles dolores gástricos que podría enfrentar tras esa explosiva experiencia.

A medida que el programa avanza, los espectadores no pueden evitar sentir curiosidad por cómo esta prueba impactará la dinámica en la casa y qué otros retos les esperan a los concursantes. Sin duda, este episodio dejó a todos con ganas de más y a Agustín con una anécdota para recordar. ¡Hasta la próxima!