Mi suegra ya ha fallecido, pero mi hijo de 4 años continúa diciendo: “Todas las noches duermo con mi abuela”
Esta es una historia real que ocurrió en mi familia. ¡No sé cómo la manejarían otras familias!
Resulta que en mi familia, además de los padres, mi hijo estaba muy apegado a su abuela. Desde que nació, ella fue quien se encargó de su cuidado. Mi suegra dejó todo en el pueblo y se vino a vivir con nosotros durante varios años, hasta que mi hijo está a punto de cumplir 4 años.
Mi suegra siempre fue una persona saludable, de buena salud, por lo que mi esposo y yo le pedimos que viniera a ayudarnos a cuidar al niño para que pudiéramos concentrarnos en nuestro trabajo. Sin embargo, hace unos meses, mi suegra cayó enferma. Mi esposo y yo corrimos de un lado a otro buscando tratamiento, pero no tuvimos resultados. Y luego, lo que menos esperábamos, sucedió: mi suegra falleció.
Desde que mi suegra murió, mi hijo ha preguntado constantemente por ella. Sin embargo, nosotros nunca le hemos explicado completamente lo que ocurrió. A pesar del dolor y la tristeza que sentimos, siempre tratamos de mantener una actitud positiva frente a él para evitar que se choque emocionalmente o se vea afectado si llega a saber la verdad.
Pero lo que sucedió la noche pasada en la habitación de mi hijo me rompió el corazón y no pude evitar llorar. Resulta que antes de que se fuera a dormir, fui a su cuarto para hablar con él y preguntarle sobre su día. No mencioné a su abuela. Al día siguiente, durante el desayuno, mi hijo nos dijo que todas las noches duerme tranquilo porque siempre está con su abuela.
Mi esposo y yo nos quedamos sorprendidos ante lo que dijo, así que decidimos revisar las cámaras en su cuarto. Fue entonces cuando descubrí algo que me dejó sin palabras: vi a mi hijo sacar una pequeña figura de madera con la imagen de él y su abuela, la acarició y la colocó junto a su cama. Luego, con voz suave, le dijo: “Abuela, te echo mucho de menos. Ya hice caso y soy obediente con mamá y papá, aunque tú no estés aquí. Me gusta mucho el regalo que me diste, pero estoy triste porque te fuiste. Vuelve pronto.”
Al ver esta escena, empecé a entender lo que estaba pasando. Parece que antes de morir, mi suegra dejó a su nieto un regalo para recordarla, pero no le explicó completamente que ella ya no volvería, tal vez por miedo de causarle más tristeza.
Lo mismo me pasa a mí: no quiero contarle a mi hijo sobre la muerte de su abuela, pero después de ver todo esto, me doy cuenta de que no puedo seguir ocultándoselo. Creo que ha llegado el momento de hablar con él y decirle la verdad sobre la pérdida de su abuela. Es algo necesario, y mientras más pronto lo haga, menos dolor le causará.
¿Cómo explicar la muerte a los niños pequeños?
Explicar la muerte a un niño pequeño es una tarea difícil, que requiere mucha delicadeza y comprensión. Los niños no suelen entender el concepto de la muerte, así que lo que les digas influirá en la forma en que manejarán la pérdida en el futuro.
- Elige el momento y el espacio adecuado
Busca un momento en que el niño se sienta tranquilo y sin distracciones, y elige un lugar privado donde ambos se sientan cómodos.
Sé honesto y utiliza un lenguaje sencillo
Usa palabras sencillas y apropiadas para su edad. Por ejemplo, podrías decir: “Abuelo/abuela se fue a un lugar muy lejano y no puede regresar”. Evita frases que puedan crear confusión como “está durmiendo” porque podrían pensar que la persona despertará.
Anima al niño a expresar sus emociones
Deja que el niño exprese sus sentimientos, y anímalo a llorar si lo necesita. Dile que es normal sentirse triste o nostálgico cuando alguien a quien queremos ya no está.
Explica el ciclo de la vida y la muerte
Puedes usar ejemplos sencillos, como explicar que las hojas caen de los árboles en otoño para que crezcan nuevas hojas en primavera, para que el niño entienda que la muerte es una parte natural de la vida.
Recuerda al ser querido
Ayuda al niño a recordar lo bonito que compartió con el abuelo/abuela. Pueden hacer una manualidad o escribir una carta para esa persona, o encender una vela en su memoria.
Acompaña al niño durante el proceso
El niño necesitará tiempo para procesar la pérdida, así que es importante que estés ahí para él, escuchándolo y apoyándolo cuando lo necesite. Hazle saber que siempre estarás a su lado.
Hablar sobre la muerte con los niños no solo les ayuda a entender, sino que también es una oportunidad para enseñarles sobre el valor de la vida y el amor dentro de la familia.