El duque y la duquesa de Sussex han recibido una invitación para pasar la Navidad en Althorp, la residencia de Charles Spencer. Sin embargo, la reticencia de Meghan Markle a viajar al Reino Unido por cuestiones de seguridad podría frustrar los planes navideños de la pareja.

Según informes, Harry no estaría dispuesto a regresar a sus deberes reales a menos que se resuelva la situación con su hermano William. Además, Meghan ha mostrado señales de descontento y confusión respecto a su papel dentro de la familia real, lo que ha llevado a especulaciones sobre el futuro de su matrimonio.

Con el rey Carlos en tratamiento, la familia real atraviesa momentos de incertidumbre. Harry y Meghan, que han estado viviendo en California, podrían perder la oportunidad de reunirse con sus seres queridos en estas fiestas. ¿Estamos presenciando el comienzo de una nueva crisis en la vida de los Sussex?

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