En una entrevista con la revista ‘Allure’, la cantante colombiana afirma que le gusta que la cultura pop empodere a las mujeres “sin robarles a los hombres la posibilidad de ser hombres, de proteger y de proveer”

Las entrevistas y declaraciones de Shakira, al ser relativamente inusuales, siempre generan atención y expectación. La cantante, que desde ahora un año, tras separarse de Gerard Piqué, vive en Miami (Florida, EE UU) junto a sus hijos, Milan y Sasha, lanzó el pasado 22 de marzo su primer disco en siete años, Las mujeres ya no lloran, que supone un paso adelante en su vida profesional y personal.

Y por ello está concediendo algunas charlas con ciertos medios de comunicación. Este 1 de abril se ha desvelado que es la portada de la revista Allure en su edición de EE UU. Además de una sesión de fotos, se ha sentado a charlar para una larga entrevista donde ha tocado distintos temas, desde su imagen física (”Nunca pensé que la belleza era mi fuerte, solo una cosa más que podía explotar”) hasta su nueva vida en Miami (”He tenido que reconstruirme, juntar las piezas que se habían caído”), su música, la creatividad, sus rutinas de belleza y cabello (ha creado una línea específica para su indomable melena) o el hecho de que como mujer ya no siente que tenga que pedir disculpas. Y, hablando de feminismo, ha surgido la pregunta acerca de qué opina de la película Barbie, el éxito del año pasado.

Y su opinión está generando multitud de comentarios.

Charlando con la entrevistadora, Shakira le cuenta que tiene entendido que, para el año 2030, el 60% de la riqueza del mundo será manejada por mujeres (un dato de un informe de 2020 de la consultora McKinsey). Al hilo del comentario la periodista le pregunta si ha visto Barbie, a lo que ella le responde que sí… y hace una larga pausa. “¿Y?”, pregunta, con curiosidad, la entrevistadora. “Mis hijos la odiaron completamente”, responde la cantante colombiana. “Sintieron que era castradora. Y estoy de acuerdo, hasta cierto punto”, afirma acerca del filme de Greta Gerwig, que ha recaudado más de 1.400 millones de dólares, convirtiéndose en la más taquillera del año y también de la historia de Warner, con ocho nominaciones al Oscar de las que consiguió un galardón, el de mejor canción.

“Estoy criando a dos niños”, continúa la artista en referencia a Milan, de 11 años, y a Sasha, de nueve. “Quiero que ellos también se sientan poderosos a la vez que respetan a las mujeres. Me gusta cuando la cultura pop intenta empoderar a las mujeres sin robarles a los hombres la posibilidad de ser hombres, y también de proteger y de proveer. Creo en darles a las mujeres todas las herramientas y la confianza de que podamos sin perder nuestra esencia, sin perder nuestra feminidad. Creo que los hombres tienen un propósito en la sociedad y las mujeres también. Nos complementamos, y ese complemento no debe perderse”, argumenta.

Entonces la entrevistadora le pregunta: “El hecho de que una mujer pueda hacerlo todo, ¿significa que debe hacerlo?”, a lo que la de Barranquilla responde: “¿Por qué no compartir esa carga con la gente que merece llevarla, cuya tarea también es llevarla?”.

Shakira junto a sus hijos Sasha (izquierda) y Milan (derecha) en los premios MTV Video Music Awards en Nueva Jersey, en septiembre de 2023.Noam Galai (Getty Images)

A lo largo de la entrevista, la cantante había hecho varias declaraciones acerca de las mujeres, de sí misma, del futuro y el pasado. Por ejemplo, afirmaba: “Crear este álbum ha sido una transformación en la que he renacido como mujer. Me he reconstruido a mí misma de la manera que considero apropiada. Nadie me dice cómo o cuándo llorar, nadie me dice cómo criar a mis hijos, nadie me dice cómo convertirme en una mejor versión de mí misma.

Eso lo decido yo”, para continuar: “Antes, cuando las mujeres pasaban por una situación difícil, se esperaba de ellas que tuvieran cuidado con sus modales, que ocultaran el dolor, que lloraran en silencio. Eso se acabó. Ya nadie nos va a controlar. Nadie nos dirá cómo curarnos, cómo limpiar nuestras heridas”.

La intérprete de Te Felicito y Waka Waka también plantea: “La de Eva fue una historia creada por misóginos para poner a las mujeres en una cajita en la que tenemos que permanecer calladas, no podemos decir lo que pensamos ni ser catalizadoras del cambio. Para mantener las cosas como están. Creo que hay algo refrescante en las mujeres cuando pueden ser ellas mismas y no pedir disculpas. Porque hemos tenido que disculparnos muchas malditas veces en el pasado”.