Ana Lilia Arechiga, de 57 años, que por años declaró ser la hija no reconocida de Vicente Fernández, no fue contemplada en el emotivo homenaje que se le realizó al cantante en la Arena VFG del rancho “Los Tres Potrillos”, por lo que acudió al Paseo de la Fama en Hollywood, en la estrella develada por su padre y junto a otros fanáticos le dio el último adiós.


“Otra persona más que se me fue. Es un sentimiento muy diferente, pero como no vivió conmigo, lo traje en el corazón, traigo el sentimiento pero tenía que descansar algún día. Se fue a llevarle serenata a la Virgen de Guadalupe”, “Que de donde esté me bendiga y yo desde aquí lo abrazo con todo mi corazón”, agregó.

En la misma conversación, Ana Lilia admitió que pese a que nunca pudo acercarse a su padre, no le guarda rencor  y está tranquila con su partida, “No me reconoció porque la familia no le permitió o porque no tuvo tiempo, pero yo no le tengo rencor, yo simplemente quise conocerlo y platicarle quién es mi madre por si se le olvidó, pero si no fue el tiempo de Dios es por algo”, mencionó.

“Fue una relación de nueve meses y mi padre sabía que mi madre tenía cuatro meses de embarazo, entonces siguió la relación pero cuando mi madre se enteró que mi padre se iba a casar con la señora Cuquita, mi mamá ya no lo dejó que se me arrimara”, pronunció.

Para finalizar Ana aprovechó las cámaras de la periodista Magaly Ortiz para enviar un mensaje contundente a la Dinastía Fernández, “Les voy a comprobar a los incrédulos que dicen que yo no soy la hija… Cuando mi padre me tuvo, no tenía nada. Entonces yo soy hija del padre humilde. quédense con su dinero, por ambición. Me dan pena”, sentenció.